La construcción de edificios es un proceso complejo que requiere la colaboración de numerosos profesionales y trabajadores del sector. Por ello, la formación del equipo humano desempeña un papel fundamental para garantizar la calidad y la seguridad de un edificio, por lo que los tomadores de decisiones deben verla como una inversión estratégica, más que como un gasto.
¿Por qué se debe invertir en la capacitación del personal de construcción?
- Propicia la seguridad laboral
La construcción es una de las industrias con mayor índice de accidentes, por lo que la capacitación de los trabajadores ayuda a que conozcan y apliquen distintos protocolos de seguridad, como el uso correcto de equipos y herramientas, que eviten lesiones graves o fatales. La formación también asegura que los trabajadores cumplan con las leyes y regulaciones de seguridad laboral.
- Mejora la calidad en la ejecución del proyecto
Los trabajadores bien capacitados cometen menos fallas técnicas porque aplican correctamente diferentes técnicas constructivas y detalles arquitectónicos, lo que da como resultado edificaciones más sólidas y duraderas.
- Aumenta la productividad y eficiencia
Una mano de obra calificada trabaja de forma más organizada y rápida, por lo que mejoran los tiempos de ejecución de un proyecto, al mismo tiempo que se evitan errores, retrabajos y costos en general.
- Permite la innovación y evolución
La capacitación constante del personal de obra permite integrar nuevas tecnologías y materiales de forma efectiva, lo que impulsa la innovación y evolución del proyecto arquitectónico. Al mismo tiempo, los trabajadores capacitados son más valiosos y tienen mejores oportunidades en el mercado.
- Disminuye las reclamaciones
La mano de obra calificada tiene las herramientas para resolver más asertivamente los problemas dentro de un complejo arquitectónico, lo que se traduce en una menor cantidad de errores constructivos, conflictos legales o económicos. De esta manera, la reputación de la empresa mejora y la satisfacción del cliente es más alta, con la posibilidad de obtener mayores referencias para futuros contratos.
- Reduce los costos a mediano y largo plazo
La formación de la mano de obra ayuda a que los proyectos se hagan bien desde el inicio, lo que da como resultado construcciones de calidad que requieren menos intervenciones futuras, beneficiando a los clientes y reduciendo reclamaciones.
- Permite una adaptación a los cambios del sector
El sector de la construcción evoluciona hacia la digitalización, como el uso de la metodología BIM, los drones, o hacia la arquitectura sostenible con edificaciones prefabricadas o construcciones verdes. Por ello, la capacitación permite a los trabajadores de obra adaptarse a estos cambios sin resistencia y estar a la vanguardia tecnológica.
- Disminuye la rotación de talento
Los trabajadores que reciben formación se sienten valorados, lo que mejora su compromiso y reduce la fuga de talento. Capacitar también permite identificar y promover líderes operativos dentro de la organización.
- Fomenta la ética laboral
La formación de los trabajadores de la construcción no solo se refiere al desarrollo de habilidades técnicas que les permitan realizar adecuadamente su trabajo, sino también a la ética laboral. Los trabajadores bien formados son más propensos a cumplir con estándares éticos, lo que promueve una cultura de integridad en el lugar de trabajo.
