Cómo Holcim impulsa nuevas metodologÃas, eficiencia y soluciones
Durante la celebración del 35º aniversario de Expo CIHAC, tuvimos la oportunidad de conversar en exclusiva, para Voces de la Industria, con el ingeniero José Alfredo Rodríguez Campos, gerente de Calidad y Estándares en Holcim, y profundizar en su visión sobre los avances, retos y oportunidades que definirán el rumbo de la construcción en los próximos años.
Con más de 27 años de trayectoria, especialización en cemento, concreto y construcción sostenible, el presidente de la Sección Centro y Sur del ACI (American Concrete Institute) ofrece una perspectiva técnica, estratégica y fundamentada sobre esta nueva etapa de la industria.
En este contexto, José Alfredo describe la Construcción Next Gen como una transformación equivalente a una revolución industrial dentro del ámbito constructivo, debido a que plantea abandonar procesos que han permanecido sin cambios durante décadas. Como señala, esta es una revolución en la construcción verdaderamente importante, porque exige dejar de utilizar procesos constructivos de hace 30, 40 o 50 años y realmente arriesgarse al uso de nuevas metodologías.
Este cambio implica agilizar procesos, reducir tiempos de ejecución, optimizar mano de obra y, sobre todo, responder a la urgencia climática mediante soluciones de menor impacto ambiental. Desde su perspectiva, la industria no puede permitirse mantener prácticas obsoletas, ya que la demanda de eficiencia y sostenibilidad es hoy ineludible.
El egresado de la UANL también enfatiza que la sostenibilidad debe integrarse como una obligación estructural dentro de la industria; para ello, considera indispensable que los permisos de construcción incorporen criterios ambientales estrictos, como límites máximos de emisiones por metro cuadrado o por tipo de obra.
En su planteamiento, esta medida obligaría a todos los actores de la cadena a involucrarse activamente en la reducción de emisiones. Asimismo, señala que las normativas deben actualizarse para incorporar nuevos materiales y procesos, de modo que la innovación no se vea frenada por marcos regulatorios desactualizados.
Innovaciones en Materiales y Procesos para una Construcción más Eficiente
Al hablar de las innovaciones que liderarán la transformación del sector, Rodríguez Campos identifica tres áreas fundamentales.
En primer lugar, menciona los concretos de alto desempeño como clave para optimizar recursos y permitir diseños más eficientes. Como explica el ingeniero:
“Si yo, en lugar de usar esos concretos, utilizo otros con resistencias de 600, de 700, puedo reducir el tamaño de las estructuras, puedo utilizar menos concreto, puedo utilizar menos materiales, tener más espacios abiertos”, lo que representa beneficios tanto estructurales como ambientales al optimizar recursos y disminuir la huella de materiales en obra.
En segundo lugar, subraya la importancia de los concretos bajos en carbono, cuya reducción en emisiones debe estar respaldada por certificaciones y sellos ambientales confiables que garanticen su impacto real dentro de la cadena de valor.
Asimismo, destaca el papel estratégico de la economía circular, recordando que “la industria de la construcción genera mucho desperdicio, y mucho de ello, yo te diría que el 90% termina en tiraderos. No es basura, son residuos de la construcción que se pueden utilizar como materiales”, lo que evidencia la urgencia de revalorizar estos insumos y reincorporarlos al proceso productivo.
De este modo, la reutilización de desechos se convierte en un eje clave para la sostenibilidad real del sector, ya que promueve una reducción significativa del impacto ambiental y fortalece la eficiencia de los sistemas constructivos al aprovechar recursos que, de otro modo, serían desperdiciados.
Además, Rodríguez sostiene que la adopción masiva de estas innovaciones depende de la evidencia científica y de la transparencia con la que se presentan sus resultados.
En ese sentido, afirma que “en la medida en que la industria de materiales, los que somos proveedores, entreguemos información, seamos transparentes, hagamos investigación, creo que eso va a ayudar a demostrar que los materiales de bajo impacto ambiental mantienen la calidad y el desempeño esperados, aun cuando presentan composiciones distintas a las tradicionales”.
Asimismo, advierte que la diferenciación en un mercado saturado de propuestas sostenibles requiere certificaciones verificables y auditorías externas que respalden cualquier declaración ambiental. Por ello enfatiza que “yo no puedo salir a decir que tengo un producto o una solución con bajas emisiones sin tener un soporte y un respaldo”, lo que convierte a las Declaraciones Ambientales de Producto (EPD) en herramientas indispensables para validar la veracidad y el impacto real de las soluciones sostenibles dentro del sector.
Desafíos Culturales, Adopción Tecnológica y la Digitalización del Sector
Uno de los obstáculos más complejos para la innovación no es técnico, sino cultural. El ganador del Premio a la Excelencia del American Concrete Institute 2016 narra el caso del lanzamiento de un cemento bajo en emisiones cuyo color era distinto al gris tradicional:
“Fue muy complicado de pronto que la gente adoptara que el cemento era rojo cuando toda la vida ha visto o ha construido con el gris”.
Ese ejemplo demuestra que incluso los aspectos estéticos pueden frenar avances tecnológicos y generar resistencia ante soluciones novedosas.
Aun así, la industria ha logrado avances significativos hacia la adopción de materiales más sostenibles. De acuerdo con el propio ingeniero:
“El 65% de nuestra paleta de soluciones en cemento son bajas en emisiones”.
Un indicador del proceso gradual de aceptación y del cambio cultural que comienza a consolidarse dentro del sector.
Por otro lado, la digitalización representa una de las mayores oportunidades para transformar la eficiencia en la cadena de valor. El ingeniero señala que “la industria sigue construyendo igual que hace 50 años”, evidenciando el rezago frente a industrias que han adoptado automatización, sensorización y análisis de datos; ya que con tecnologías como los sensores para medir la resistencia del concreto en tiempo real sustituyen métodos centenarios, mejoran la precisión y reducen tiempos, residuos y costos asociados. Su implementación demuestra que la innovación digital no solo mejora la calidad, sino que acelera la toma de decisiones y optimiza procesos constructivos.
Asimismo, el ingeniero destaca que la confianza entre actores es esencial para acelerar la adopción tecnológica, ya que solo mediante la colaboración abierta se pueden derribar las barreras tradicionales del sector.
Sobre este punto, explica que “a mí me gusta mucho usar el concepto de tener la voluntad. Si unimos las voluntades de todos los actores de la industria de la construcción, si somos transparentes, si ponemos sobre la mesa los pros y los contras porque no hay solución que aplique para toda construcción, creo que en la medida en que todos adoptemos eso, podríamos de alguna manera hacer mucho más fácil el proceso de producción y ganar compensación”, subrayando que la claridad y la transparencia técnica son determinantes para incorporar nuevas soluciones.
En paralelo, la integración de materiales inteligentes como los concretos fotoluminiscentes capaces de absorber luz solar y emitirla durante la noche, o los concretos bioreceptivos que pueden absorber COâ‚‚ sin comprometer su desempeño anuncia un futuro en el que las edificaciones contribuyan activamente a la sostenibilidad. Según el ingeniero, estas innovaciones permitirán estructuras más autosuficientes y con la capacidad de compensar parte de su impacto ambiental a lo largo de su vida útil, lo que abre paso al análisis profundo del ciclo de vida como una herramienta indispensable para evaluar los beneficios reales de cada solución.
Esta visión enlaza directamente con la necesidad de valorar no solo el costo inicial de los materiales, sino su comportamiento durante décadas, lo que conduce al siguiente punto: la importancia del análisis del ciclo de vida y la responsabilidad compartida para avanzar hacia una sostenibilidad integral en la industria de la construcción.
Ciclo de Vida, Sostenibilidad Real y Responsabilidad Compartida
El análisis del ciclo de vida se presenta como una herramienta clave para impulsar la sostenibilidad en la toma de decisiones; puesto que permite evaluar el verdadero impacto y rendimiento de una solución a lo largo del tiempo.
Sobre este punto, el ingeniero explica que “si solo veo el costo del material, la solución sostenible puede salir peor, pero si se realiza un análisis del ciclo de vida y demuestro la durabilidad, el mantenimiento y la resiliencia, convences al cliente”
Enfatiza la importancia de considerar todos los factores que influyen en el desempeño de una edificación durante décadas, más allá del costo inicial de los materiales.
Finalmente, el ingeniero José Alfredo Rodríguez Campos subraya que la industria de la construcción tiene una responsabilidad central en la lucha contra el cambio climático.
Recuerda que “somos responsables del 40% de las emisiones de COâ‚‚” y que, por lo tanto, el sector posee una oportunidad y un deber de liderar soluciones sostenibles.
De acuerdo con su visión, la colaboración entre diseñadores, constructores, proveedores y usuarios es fundamental para reducir estas emisiones y avanzar hacia un modelo constructivo más eficiente, innovador y respetuoso con el ambiente.
Para él, si todos los actores trabajan alineados, “verdaderamente podemos tener un cambio” hacia una construcción más inteligente y sostenible.